Bogotá octubre 28 de 2018
Hoy nos tocó la Doble al tal Verjón
Marcolino, yo creo que la mejor ruta es la autopista, subimos por la calle cien hasta la carrera séptima y cogemos la circunvalar de una, son las 6 y cuarto, vamos bien, ¿le parece? Listo, entonces hágale de una. Por acá el clima es perfecto y se ve que por los cerros también.
¿Vio las fotos que envió Rivera temprano?
- Si, oiga me despertó, cuando llegó el mensaje. Eran como las cinco de la mañana.
Ja, Ja, el hombre madrugó a tomarle fotos a los cerros de Monserrate y Guadalupe desde su ventana en las torres de Fenicia, para que no se corriera nadie. Acá veo en el chat de WhatsApp que ya salieron los compañeros que van en bici y que se encontraron frente al funicular, los vamos a alcanzar por ahí en el kmt 4 de la subida al Verjón. A esta hora si rinde mucho en carro, ¿cierto?
-Claro vea esta circunvalar sola, hasta no reconozco las calles se ven diferente sin carros.
Listo allá está la Y, el kmt cero de la subida al Verjón, vamos a ver a quienes vemos primero en la subida. Oiga qué bueno que se ve policía por acá, ahí detrás de ese CAI, está el barrio Los Laches, eso por acá era un atracadero.
– Si yo me acuerdo cuando estaba en el Banco que por acá ni pensar en subir, el ciclista que se arriesgaba llegaba sin bici y empeloto, si le iba bien.
Mire, mire Marco allá van en ese grupo, están A. Rivera, Giaco, Fabio, Chinazo, los William, Duarte y Bolaños, Pablito, Ricardo, Henry, conté ocho. Pasémoslos a ver si alguien más va adelante. Ese es el carro de Ricardo, en el porta la bici de Nobile, va con el conductor, es un conocido de Henry que le maneja un taxi y lo contrataron.
- Oiga y entonces el Pulga dónde va?. Yo no lo vi.
Debe ir más arriba.Será que llegaron en el carro de Ricardo. Galindo al fin no vino, había confirmado.
- Qué va a venir, ese es pura mamadera de gallo .
Pero entonces si todos van en bicicleta el único carro que va a quedar en el páramo es su Duster Marquito.
- Hay juemadre, que vaina, ojalá que no.
¿Será que me bajo y subo al páramo en bicicleta para calentar las piernas un poco?. Ya pasamos lo duro, creo que quedan solo como tres kmts.
- Pues ahí verá, si quiere paro.
Listo, cuadre aquí a la entrada de Guadalupe en este planito y bajamos mi bici, a ver si alcanzo a coronar antes de que me lleguen, vienen bien atrás. ¿Quién viene en ese carro que paró?
- Ni idea no veo bien.
Es Paola la hija de William y el mono su hermanito, qué bueno nos van acompañar, la saludo y me voy. Chao.
Se me acabó el paseo en carro, ahora unos pocos kilometricos de subida suave para calentarme, atrás dejo a Marcolino hablando con Paola, qué buen día hace, afortunadamente la carretera está sola.
Que es esa vaina, ¿el mojón del Km7?. Uyyy ..ta como que la embarré con C, me equivoqué, faltan 11 kmts para el páramo, pero ya tocó seguir. Claro ahí veo la zona de las “fallas geológicas”, esos verracos hundidos que parecen toboganes en plena subida.
Listo, ya logré superarlos, esta vaina sigue en subida, claro faltan ya tres kmts para llegar a la primera parte de la subida al Verjón y luego los siete para llegar a la cumbre. Qué pelota yo, no quería hacer la subida y me tocó a la fuerza, faltan ya solo 4 kmts, esta vaina no tiene mucho descanso. Chao, allá va Geoffre en su camioneta, por lo menos ya son dos carros que quedan en el parque Matarredonda, mientras bajamos a Choachí.
¿Hey, ese no es Pulga el que bien bajando? Claro y con Galindo en persona, fíjese y nosotros que no le creíamos. Devuélvase y subimos con todos, me grita Pulga, yo me hago el sordo y sigo en mi tarea, (luego sabríamos que los dos habían subido adelante para dejar sus carros en el parque Matarredonda). Último kilómetro ya está cerca la cúspide del páramo, pienso que voy de campeón, pero justo en ese momento me pasan William y Ricardo, y faltando 30 metros Alberto Rivera riendo, no me quería perder el tercer puesto!.
Afortunadamente coronamos, ya estamos frente al parque Matarredonda, allí ya está Geoffre alistando su bicicleta, llega una camionetica VW nuevecita, es Martha “Romerito” la esposa del Chinazo, con su hija Lissette, trajo bici, parece que se le va a medir a la subida. Llega también Alberto Otálora en un carro que no le conocíamos (es del seguro al suyo lo golpearon), viene con Sofi su hija, cómo está de grande la niña, me dicen que ella conducirá el vehículo de Alberto desde Choachí, mejor dicho, con el de Paola la hija de Willy ya sería cuatro carros acompañantes, vamos a estar súper protegidos.
Alberto Rivera me invita un tinto en la tiendita de la entrada al parque, pero como todos comienzan a bajar se va y me dice, Orlandito te tocó pagarlo chao. Apenas quedan dos cupitos en el vehículo de Paola, para Marcolino y yo, así que a bajar, el destino nos espera en Choachí, no nos salvamos de la subida, son las 8 y 30 a.m. y el día sigue esplendoroso, pocas veces se aprecia el páramo con un cielo despejado y soleado, definitivamente los Dioses del Ciclismo están con nosotros.
- Qué bonita está la carretera, parece recién pavimentada - dice Paola.
Si, hace poco la arreglaron, este primer pedazo estaba medio destapado. Una pregunta Paola, ¿cómo le ha ido a Dieguito?.
- Mira que muy bien, ahora si está súper amañado. En diciembre viene, está contento de monitor de matemáticas.
¿Y cuándo le toca volar?.
- Pues esperamos que el año entrante, es que eso es difícil, hay poquitas oportunidades no se sabe, los que no alcancen les toca aplicar para navegantes, planeación, mantenimiento o en inteligencia. Vamos a ver.
Llegamos al puente mirador (puente de la Virgen), hay restricción del paso vehicular, las rocas que han caído de la Peña casi se llevan las barandas, ya limpiaron, pero por precaución colocaron maletines reflectivos protegiendo las torcidas barandas por lo que la vía se reduce a un solo carril.
Así entre la amena charla de Paola, quien nos habla de helicópteros y aviones y de su experiencia y las intervenciones de Marcolino, un tanto preocupado con las curvas y recordando la vez que hizo la subida, se nos fueron pasando los 22 kmts de bajada y las aterradoras curvas que desde el vehículo se ven agresivas, no nos espera nada bueno.
Pronto divisamos abajo en una hondonada la población de Choachí, en minutos llegamos al restaurante que ya conocemos, llegó algo mareado con tanta curva. Otro domingo de desayuno con los CicloBeres, qué bueno compartir con quince de los integrantes de esta familia, que se le midieron Choachí.
Cuando se planeó la etapa con el Chinazo y Pulga, la verdad pensamos que la mayoría subiría desde la circunvalar en carro hasta el páramo y luego si descenderíamos a Choachí, pero vea Ud. hay ocho ciclistas que en este punto ya llevan 40 kmts, 18 de subida: A. Rivera, Giaco, Fabio, Chinazo, los William, Duarte y Bolaños, Pablito, Ricardo y Henry. Pulga y Carlos, llevan 36, 4 en subida y yo 11 en loma pues por error me bajé antes.
Parece que el caso es de hambre, veo calditos con costilla, arroz con huevos pericos, chocolates, cafés y buenas porciones de pan, nadie quiere arriesgarse a una pálida por falta de comida. Encima Willy nos entrega a cada uno una bolsita con refrigerios, el quiso como todos los años colaborar con sus amigos. Tan bonito dirían las niñas, Gracias Willy!!.
Igualmente, un agradecimiento especial a Ricardo nuestro conductor elegido, quien se ofreció muy amablemente para reemplazar a W. Trejos. Para no perderse ese suculento plato de montaña, pocas veces visto, como comentamos trajo su propio conductor.
Las bromas de Fabio y Giaco hacia los Pulgas (al enterarse de que nuevamente se van para Miami de Shopping), amenizan el prolongado desayuno. Aprovechamos para cuadrar la invitación que le habíamos hecho a Giaco para despedirlo, viaja el 26 de noviembre para Europa, para hacer la pasantía de su doctorado probablemente en Portugal, estará al menos un año y luego decidirá en dónde se queda, esta vendiendo su bici y hasta la cama, dice que con poco uso. Convinimos en que el sábado 17 de noviembre nos encontraremos en el CDCH, montamos en bici un par de horas y después del descanso almorzaremos allí. ESTÁN TODOS INVITADOS.
En Choachí Comentamos que Don Guillo se perdió una de sus etapas favoritas, sigue "costipao" ojalá que se mejore pronto. Pero no se preocupe, acá entre nos, que nadie se entere, le adelantamos una chiva, en la programación de noviembre tendremos una que le gusta: Machetá. Pilas Mauro Peña a entrenar con juicio, es la última dura del año, esto se acabó..
Ahora si a lo que vinimos dijo la recién casada: Lissette Gonzálz baja la bici muleto de Eduardo y arranca en tenis a subir, una verraca esa Doctora (es médica de Colsanitas), toda una "Chinaza" . Nos contó “Papi no me ha querido comprar la Bianchi”, el Chinazo apenas sonreía.
Al rato parte Nobile y luego Marcolino. Unos minutos después salimos con Pulga y el resto del grupo nos da una ventajita; Geoffre se da cuenta tarde que se quedó con “los duros”, pobre, pero eso si quien lo manda.
Nos esperan 22 kmts de subida, hasta el Verjón, señores esto hay que tomarlo con calma, especialmente quienes ya se aplicaron los 18 subiendo desde Bogotá y ahora tendrán que repetir la dosis de páramos desde la vertiente de Choachí. Mirar esta gráfica asusta, fíjense los porcentajes de desnivel.
Pero la verdad no es tan impresionante como lo pintan. Como Choachí está bien abajo como en un hueco, desde la salida la carretera pica hacia arriba, el primer kilómetro es durito toca subirlo con buena relación. Pero luego, sin que se vea algún descanso se suaviza un poco y se hace pedaleable, luego vuelven a aparecer curvas pesaditas durante otro kilómetro y así como ven en la gráfica se van alternando, tiene un pequeño descanso en el km 12,5. Los cuatro finales son relativamente suaves, lo que pasa es que lo cogen a uno mamado.
Diría yo que es una subida más de maña que de fuerza, por lo larga pero que implica tener entrenamiento previo.
Recién salimos con Pulga, pasó Carlos Galindo, a un paso que parecía llevar un motorcito en su bici, definitivamente el jugo de cebada le ha servido mucho a este Repúblico
Una hora tardamos con Pulga para llegarles a Nobile y a Marcolino, este par están en su mejor nivel de los últimos años, antes nos pasaron Fabio, William, Henry, Eduardo y A. Otálora. Luego llegaron A. Rivera y William Bolaños. Alberto le colaboró un ratito a Pulga con Nobile y gastó sus ahorros energéticos así que le tocó subir reguladito detrás de Bolañitos. Marcolino se fue, se fue y se fue, dejó atrás a Rivera, a Bolañitos a Pulga y a Nobile y logró cazar a Lissette. Nobile tenía un reto, llegarle a Lissette y lo logró al final.
A falta de casi 5 kmts yo puse pie en tierra para descansar un par de minutos, estirar los músculos de la cintura, pensé que venía de último, pero para mi sorpresa unos metros abajo tambien se habían bajado a descansar unos minutos Giaco, Pablito y Geoffre, se veían igual de cansados que yo.
Pasando el puente ya estábamos a 4 kmts de la meta final en el páramo, la pendiente se suaviza y nos permite bajar piñones para avanzar más rápido (si quedan fuerzas cabe el plato grande). Finalmente, en mi caso luego de dos horas y 45 minutos tuve por fin a la vista el Parque Matarredonda, donde termina la larga odisea. Giaco llegó unos segundos después afectado por los calambres, venía de una dura gripa con fiebre y de un largo descanso, igual Pablito, aún convalesciente de los cálculos. Geoffre encontró en estos amigos los mejores partners para concluir con éxito la dura etapa.
Felicitaciones a todos los quince valientes que se le midieron al reto, nadie llegó en el carro. Gracias a todos los acompañantes, Martha, Paola, Sofi.
Buena jornada la de Mauricio Ordóñez, nos cuenta subió con la “monareta de Edna hasta Guadalupe y regresó a casa. Nos preguntamos ¿qué le pasó a su bici de ruta luego del accidente? No la hemos vuelto a ver. Pilas Mao que ya llega la despedida del año y a esa no puede faltar Ud. ni su familia.
Amigos, este fue a grandes rasgos el relato de lo que podríamos llamar La doble al tal Verjón, puerto montañoso que se ha puesto de moda; los jueves de madrugada lo frecuentan muchos ciclistas, entre ellos un grupito de Ciclobeeres. Teníamos entonces que incluirlo por obligación en el menú de rutas de la programación, además ahora que uno de nuestros ciclistas lo acabó de volver famoso, al construir una frase que, guardadas las proporciones, se volvió casi tan famosa como estas:
“El tal paro nacional agrario no existe”- Ex Presidente Santos
“Estoy muy verraco con usted, y si lo veo le voy a dar en la cara, marica”: Ex Presidente Uribe
"30 segundos niña y termine”: Senador Macías a estudiante de la Nacional que intervenía sobre crisis de universidades públicas.
"Podría disparar a gente en la Quinta Avenida y no perdería votos" Donald Trump.
Y finalmente la nuestra:
“Señores programadores ni en cicla voy al tal Verjón, menos en mi carro…” William Trejos.
Nota: Ver las imagenes de la salida en |
