Bogotá febrero 12 de 2023
Muchas emociones juntas
Relato por Alberto Rivera Marín
 |
EL MENSAJE:
“Buenos días. No puedo asistir hoy. Suerte y que se diviertan Nos vemos en la próxima.”
Con estas palabras, a las 5:46 de la madrugada, recibimos la noticia de nuestro compañero de ciclismo, Orlando Márquez Murcia, en el sentido de que no contaríamos con su presencia en la jornada de hoy. De inmediato se me activó el chip del reportero y, sabido era, que hoy en la noche me sentaría a escribir, a mirar qué ideas plasmar para la crónica, pero con lo único que me enfrento, es con el síndrome de la hoja de papel en blanco ¡es decir, ni idea ¡
Muchas conjeturas se tejieron en el grupo alrededor de esta noticia y lo único que se nos ocurrió pensar es que, ¡ …a Orlando se le dio!. En fin, él se la perdió, porque las emociones del día de hoy fueron muchísimas.
Para empezar, vimos con agradable sorpresa el regreso de nuestro compañero Alberto Otálora, quien, aunque ataviado con su consabida chaqueta oscura, pero con el uniforme oficial debajo de la misma, se hizo presente con Santiago Otálora, su hijo, el popularmente conocido como “Santi”, pues los mayores no dejaremos de ver a los hijos de nuestros compañeros como los pequeños jóvenes que desde niños nos acompañan en estas lides.
 |
Muchas gracias para Alberto y para Santi, quienes muy amablemente nos ofrecieron su asistencia y nos proveyeron de ricas viandas energizantes y deliciosos bananos. ¡Gracias muchachos!
También, con mucho agrado destacamos la nutrida asistencia de hoy, que fue de 17 CicloBRs y 5 invitados con la presencia de Santiago Otálora desde su carro acompañante:
Luis Pulgarín, Ricardo Rodríguez, Gabriel Avendaño, Alberto Rivera, Héctor Pedraza, Wilfran Díaz, Javier Fernández, Eduardo Bedoya, Pablo Torres, Orlando Carrillo, Francisco Morales, Marcolino Barrera, William Duarte, Guillermo Durán, Alberto Otálora, Fernando Flores, Nobile González, INVITADOS Julio César Florián, Amigo de Pablo Torres. Los amigos de Guillermo Durán: Ever González el de la todo terreno, Ricardo Buitrago, Duberney Marin el novato y Mauricio Herrera, el señor que fue a Letras. Finalmente, Santiago Otálora nuestro flamante conductor de hoy.
El ex CicloBR, Luís Alfonso Rodríguez, quiso acompañarnos, pero motivos de última hora se lo impidieron; él solicita que le hagamos llegar también las programaciones dominicales. Igulmente Melki había llamado para avisar que lo esperaran, pero nunca apareció.
Nos tomamos la foto oficial, un usuario del surtidor de gasolina Terpel amablemente nos ayudó a captar; pero, esta vez el fotógrafo de turno sí tomó la foto más no video, como equivocadamente hizo el “Gato” de Mosquera, ¿recuerdan?.
Pues bien, en este momento el amigo Alberto Otálora se dio cuenta de los cambios que se han presentado en CicloBR en los últimos tiempos, pues no quería quitarse la chaqueta oscura que venía luciendo y, todos los demás compañeros, literalmente le cayeron encima y lo despojaron de la misma, con el fin de tomar la foto oficial. Gracias Alberto por el gesto de haber aceptado con agrado y sonrisas esa pequeña solicitud. Lo acordado en la última Asamblea es que, quienes estén afiliados a CicloBR, deben lucir la camiseta oficial para el día de la respectiva salida.
Partimos exactamente a las 7:15 de la mañana, con clima agradable, pues no estaba haciendo tanto frio como la semana anterior, pero de todas formas tuvimos que esperar la llegada de Guillermo Durán con su séquito de invitados, muy queridos y amables todos ellos; como también la llegada de nuestro profe Pablo Torres y su invitado (Tuvimos que enviarle a Wilfran, quien muy amablemente aceptó devolverse a la Bomba Terpel para traer a Pablito y a Julio César, su invitado).
La disyuntiva que se presentó, entonces, respecto del camino a tomar, fue la de escoger una ruta que nos llevara hacia Tabio, porque, a pesar de la información en el sentido de que se encontraba como un tapete, la verdad es que hubo una sugerencia de tomar otra ruta, como en efecto se hizo; pero, igualmente fuimos a desembocar a la misma ruta deteriorada hacia Tabio.
Fueron 23 tortuosos kilómetros los que transitamos entre Siberia y la salida de Tabio, pues es una carretera muy abandonada y, seguramente, deteriorada como consecuencia del intenso invierno que padeció el país durante el año 2022.
La subida hacia el Alto de Canicas, de seis kilómetros y medio, tampoco estuvo exenta de baches y deterioros en la vía; sin embargo, sirvió para ver el mejor espectáculo de la jornada, pues tres élites venían empujando a tres “chuchas”, perdón a tres distinguidos(a) ciclistas, con regular nivel de entrenamiento, a quienes soltaron faltando doscientos metros de la llegada para que se dieran “garra” y se emocionaran haciendo el sprint de sus vidas para ver quién llegaba primero a Canicas.
Según los reporteros de CicloBR en la vía, Marcolino se llevó el premio mayor, seguido muy de cerca por la señora Nobile (Con su nueva pacha) y llevando el farolito en sus manos, nuestro querido “Pachito” Morales. Los élites fueron Pablo Torres, Wilfran Díaz y el infaltable Luís Eduardo Pulgarín (Alias Pulga).
En el Alto de Canicas, la conversación se centró en la definición del sitio donde haríamos la parada para desayunar, pero no hubo acuerdo: mientras unos pedían ir a la panadería, otros decidimos ir a tomar caldito a la Plaza de Subachoque, que es un sitio muy agradable, sólo para ciclistas, donde gozamos de los manjares tradicionales: Caldo de costilla, de pescado, de pata de res y la famosa “criadilla”. Pues bien, no hubo acuerdo y el grupo se dividió.
Esperanzados en que cuando llegáramos al parque encontraríamos a nuestros compañeros para seguir el camino hacia Siberia, la sorpresa fue que nos habían dejado a nuestra suerte, menos Santi, quien amablemente nos acompañó durante todo el camino de regreso. Mi recomendación es que, así como se programan las rutas para cada domingo, también se definan los sitios donde se harán las paradas a desayunar y, siendo más detallistas, sugeriría que también se indicaran los sitios para el reagrupamiento y, quizás así, podríamos evitar las dificultades propias de dejar compañeros a su suerte.
Volviendo a la carretera, a este redactor le correspondió la difícil tarea de traer al grupo “colero” por entre los huecos, baches, ondulaciones y destapados encontrados en la ruta entre Subachoque y Puente Piedra; la verdad, gracias a Dios no pasó nada, pues la vía no es recomendable para las jornadas del domingo.
Ya en la vía de regreso hacia Siberia, pese a que todo venía funcionando muy bien, tuvimos que esperar largo rato a Guillermo Durán y a algunos de sus pupilos, quien montado en una “todo terreno” se “fundió” y a Guillermo le tocó acompañarlo, sólo que cuando pasaron por el sitio donde los estábamos esperando, iban como “alma que lleva el diablo” y nos tocó entrar a perseguir.
En ese interregno y faltando unos tres kilómetros del retorno a Siberia, quien les escribe esta nota sufrió una caída muy parecida a la que tuvo nuestro Egan Bernal, pues para evitar la brisa agaché la cabeza, con tan mala suerte que tropecé con un ciclista en la vía.
Pues nunca supe si fue que aumenté la velocidad o el señor redujo la suya; el caso es que, ambos nos fuimos al suelo, pero gracias a Dios no pasó de unos rayones en la pierna y tres radios perdidos en la rueda del infortunado ciclista con el que me encontré abruptamente. A esta hora de la noche (10:09 p.m.) ya las heridas secaron y me encuentro en perfectas condiciones. Muchas gracias a Mauricio Herrera (Invitado) y a Gabriel Avendaño, quienes me asistieron solícitamente y, en cuanto al ciclista, hubo que dejarle algunos pesos para que arreglara su bicicleta.
 |
La tertulia estuvo muy amena, la cual giró alrededor de la venta del marco de la bicicleta “Rosa” de Marcolino Barrera, las razones que habría tenido nuestro dilecto amigo Orlando Márquez para abandonarnos el día de hoy y, la aparición de un invitado, quien prácticamente se hizo invitar, como es Duberney Marín “El Novato”, quien resultó ser un paisa del Quindío, de conversación amena y muy entusiasta con CicloBR, pues hasta video nos tomó para mostrarle a sus amigos en Armenia.
Ricardo Rodríguez aún tiene sus “Dudas”. ¡Habrá que ver!
¡FELIZ SEMANA!
|