Banco de la República buenos días…. Un momento por favor…
Así, con voz dulce y amable, contestaba la señorita Ana Elvia Niño Aldana sardinita quien recién había ingresado al BR como operadora del conmutador del Banco de la República.
Estudió Bibliotecología y Humanidades en El Rosario, pero nunca quiso saber nada de libros y prefirió ir al entonces Departamento de Relaciones Industriales donde tenía contacto con la gente, pues esa es su vocación.
Sus hermanos le presentaron a Luis Alberto López con quien contrajo el matricidio en 1991.
El deporte de su esposo era la navegación en Vela y pronto Anita se volvió experta en el “gratil”, la “baluma” la “orza”, “el sotavento y el barlovento” y toda esa terminología propia de ese deporte de los vientos, pues llegaron a tener un pequeño velero y participaban en Regatas en Guatavita.
Anita manejaba el spinnaker. No, aunque no nos crean eso no tiene nada que ver con las espinacas!!. Pá que vean que no solo sabemos de ciclas, el tal espinaca es una vela especial que se utiliza cuando el viento sopla desde atrás (vientos de popa).
La vela tiene forma de medio balón y es muy grande. Se coloca delante del mástil de manera que el viento entra en la vela y empuja la embarcación hacia delante.
Pero las ocupaciones de Luis Alberto y un susto tremendo que se pegó Anita, pues un ventarrón casi se la lleva del barco, hicieron que dejaran el deporte de las velas y abandonaron en el muelle el barquito de madera, del que solo les quedaron dos juegos de velas y el timón que hoy conservan como recuerdo.
De las velas pasó al tenis deporte que aún practica.
Para entonces tenía una bicicleta que le había regalado su tío predilecto, en la cual había aprendido a montar. Como no la usaba, terminó vendiéndosela a Noé Muñoz en cómodas cuotas mensuales, pues ella no la usaba.
Luego de 23 años de labores en el Emisor, gran parte de ellos en Recursos Humanos, se retiró de la Sección que precisamente atendía a los pensionados del BR.
Para ocuparse puso un café Internet que llamó “Web On “… de verdad, así como suena. Negocito que terminó siendo el pasatiempo de su señora madre quien se ocupa de el.
En el 2001, motivada por los buenos comentarios que se oían del grupo de ciclismo decidió iniciar con nosotros el plan de reacondicionamiento físico y se amañó tanto que se quedó pues le encantó el ambiente de camaradería del Club.
Decidió comprar bicicleta, para unirse a los “varones“ que recorren las carreteras en los caballitos de acero.
Entonces le pidió a Noé que le volviera a vender otra vez su vieja bici, pero le tocó pagar “un poquito más” pues parece que se había valorizado…
Para sorpresa de todos resultó ser una “dura” de las bielas especialmente en las subidas en las cuales se convirtió en el tormento de los gorditos. Como ven pasó de las Velas a las Bielas.
El 13 de julio de 2003 se unió en Cali al grupo hizo la travesía Quito - Bogotá y recorrió con ellos más de 500 kilómetros. En el 2005 participó en la Travesía Cabo de la Vela- Bogotá.
Desde entonces no se pierde ninguna de las actividades de CicloBR, pues dice que el grupo ha pasado a ser como parte de su familia.
Anita se ha compenetrado tanto con el grupo que parece que llevara veinte años con nosotros. Se ha ganado el cariño de sus compañeros a tal punto que en carretera no la desamparan y siempre cuenta con una mano amiga que le da el empujoncito para pegarse al lote cuando esos varones olvidan que hay damas en el grupo.
El "alambrito der Oro" (así se llamó un trofeo que le otorgamos) ha aprendido a soportar las bromas y los chistes de sus compañeros de manera estoica. La consideramos pues no es fácil convivir con "tantos hombres".
De verdad pensábamos que Anita solo se dedicaba al tenis, al ciclismo y a los té canasta con sus amigas, pero como últimamente había descuidado los entrenamientos, decidimos investigar la causa y descubrimos que realmente tiene otro “camello” que le ocupa gran parte del tiempo en la semana.
Fuimos a visitarla y nos encontramos con la sorpresa de que desde el 2005 es la encargada de Recursos Humanos de SERVICIOS INFORMÁTICOS la empresa de su esposo que se dedica al diseño, estudio y montaje de infraestructura de redes para centros de datos (data centers). La empresa lleva 14 años y tiene hoy en día clientes tan importantes como Dupont de Colombia, Cine Colombia, Panamericana, Hewlett-Packard, Dell, IBM, Alpina, Alfagres, Emcocables, Colegio Nueva Granada, Cementos Argos.
Allí la encontramos muy seria en su labor diaria con el manejo de la empresa (parece que en la oficina no chifla como en carretera). Nadie la molesta como en el grupo de ciclismo pues allí “la langaruta” (como le dice cariñosamente Alejandro Rodríguez) es la Jefa pluma blanca, pero nos contaron que es muy buena papa con sus colaboradores.
Aunque su labor se centra básicamente en la parte del recurso humano y el manejo del inventario aún se muere del pánico cuando le toca ir a reuniones en las que se tratan temas técnicos (Redes IP, Wi Fi , UPS, CCTV, etc.etc.) pues ya tuvo suficiente con las EPS, IPS, UVR que manejaba en el BR.
Esos temas complejos se los deja a Luis su esposo, quien para compensar no sabe nada de bicicletas.
Nota: Este es el primero de una serie de mini-reportajes que estaremos haciendo con los integrantes de CicloBR para conocer un poco más de la vida de estos amigos con quienes compartimos la mayoría de los fines de semana del año, pero que en muchos casos desconocemos a qué se dedican.
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